En varias ocasiones he conversado sobre lo mucho que me encanta la época navideña. Cada año disfruto cuando inicia noviembre y todas las calles, espacios públicos y hogares comienzan a llenarse de luces, árboles y distintas decoraciones navideñas, ya que, además de darle vida a los lugares, me recuerda el nacimiento de Jesús, quien es el regalo más grande que el Padre nos dio, pues Su vida es la promesa de salvación y redención para la nuestra.
Además, la época navideña es el momento del año en el que la mayoría de las personas se reúnen con amigos y familia para compartir momentos agradables. Sin embargo, hay muchísimos que se enfocan únicamente en celebrar y hacen a un lado el verdadero significado de esta hermosa celebración. No está mal reunirnos con quienes amamos, pero no debemos olvidar que Jesús es la razón de la festividad.
Hay muchas maneras en las que podemos vivir el verdadero significado de la Navidad. Una de ellas es ayudar al prójimo y al necesitado, y mostrarles el amor de Dios. No hay nada más lindo y reconfortante que darle un poco de lo mucho que Dios nos da a quienes más lo necesitan, así que, si tienes la oportunidad y el deseo de hacerlo, no lo dudes y comparte alimento, vestimenta y Palabra con ellos. Recuerda que podemos ser instrumentos de Dios en cualquier lugar y en cualquier ocasión.
Ahora bien, cuando dejamos que Jesús nazca en nuestros corazones, experimentamos una transformación profunda y completa, pues nos convertimos en un lugar de amor, paz y esperanza para otros. Además, esto nos permite sentir un amor mucho más grande por Dios y por los demás, y empezamos a vivir de forma más intencional, sabiendo que el Espíritu Santo siempre va con nosotros.
No sé de qué manera conmemoras el nacimiento de Jesucristo y desconozco las tradiciones que siguen en tu familia, pero te invito a que este 24 de diciembre, justo en las vísperas de la Navidad, busques y alabes al Señor. En Casa de Dios —la iglesia que presido junto a mi esposo—, aprovechando que esa fecha en este año cae en día domingo, conmemoraremos el nacimiento de Jesús con un precioso servicio que denominamos “Adoremos al Rey”. Si estás en Guatemala y deseas asistir, te esperamos a las 7:00 y a las 11:00 a.m.
Mi deseo y oración para ti en esta bella temporada es que Jesús nazca de nuevo en tu corazón; que te llene del amor y de la paz que necesitas en este momento. Aprovecha cada instante de este mes para abrazar y recordarles a tus seres queridos cuánto los amas y lo importantes que son en tu vida, así como para agradecerle al Señor todo lo que te proveyó en este 2023. Recuerda que todo lo que nos sucede tiene un enorme propósito, aunque en su momento no lo entendamos. ¡Que Dios te bendiga y que pases una linda Navidad!