El matrimonio, sin duda alguna, es una de las etapas más bellas de la vida. Aunque en ocasiones se torna difícil ejecutar correctamente el papel de esposa, el Señor ama la vida conyugal y nos equipa para permanecer en unidad matrimonial y ser fieles.
No hay universidad que nos enseñe a ser esposas y esposos, sin embargo, podemos tomar como ejemplo los buenos matrimonios que nos rodean para aprender de ellos. Asimismo, las Escrituras no nos dan instrucciones precisas sobre las relaciones amorosas, pero sí nos hablan de compromiso, respeto y afecto entre dos personas con un mismo propósito.
Es por ello que quiero hablarte de un tema que he tratado en varias ocasiones y que me encanta: las cinco etapas del matrimonio según psicólogos y psiquiatras de la clínica Minirth-Meier de Dallas, Texas, Estados Unidos; quienes hicieron un libro al respecto:
Si no conocías estas etapas, ahora, dependiendo de los años que lleves casada, podrás saber en cuál te encuentras y ser mucho más intencional en tus decisiones. Yo estoy por entrar a la quinta etapa y debo aceptar que en mi matrimonio he tenido que enfrentarme a distintas situaciones que me han enseñado que, para que las relaciones entre dos personas funcionen, es necesaria una lucha diaria y entrega de ambas partes.
Pídele al Señor que te guie tanto a ti como a tu esposo para que Su amor crezca y se fortalezca cada día más, y que les dé la fuerza y sabiduría para superar juntos las distintas fases de su relación y avanzar hacia la vida plena que Él ha diseñado para cada matrimonio.