El próximo domingo 25 de junio, en Guatemala, se llevarán a cabo las votaciones de las elecciones generales de 2023. Es un día cívico en el que todos los guatemaltecos comprometidos con un mejor país asistimos a las urnas a emitir nuestro voto para elegir a las autoridades que gobernarán como presidente, vicepresidente, alcaldes y diputados durante los próximos cuatro años.
Hay miles de personas que no votan porque creen que hacerlo no generará ningún cambio; y muchas otras que dicen estar cansadas de que con cualquier político electo siempre sea lo mismo. Por supuesto que es frustrante para millones de guatemaltecos ser testigos de la corrupción, la impunidad, la delincuencia y muchas otras malas decisiones. Sin embargo, es nuestra obligación ciudadana elegir a nuestros próximos gobernantes por medio del voto.
Debemos entender que, durante un proceso electoral, la participación de los ciudadanos es fundamental para la construcción de un mejor país. Es por ello que cada cuatro años, sin importar la edad que tengamos, debemos informarnos, emitir nuestro voto e, incluso, ser voluntarios (quienes así lo deseen) con el fin de dejar de ser solo espectadores. Debemos involucrarnos en las decisiones importantes que se toman en el país.
Nuestra hermosa Guatemala está llena de personas que conocen el poder de Dios, por lo tanto, como creyentes e hijos Suyos, en estos próximos días, previo a las elecciones generales, debemos doblar rodillas, interceder por el futuro del país y orar por cada uno de los candidatos, puesto que es lo que Él nos manda a hacer en Su Palabra. Independientemente de quiénes resulten electos, debemos comprometernos con el Señor y el bienestar integral de nuestro país.
Si aún no sabes por quiénes votarás, en estos próximos días dedica un espacio de tu tiempo para conocer los perfiles profesionales, las ideologías y los planes de trabajo de cada uno; o por lo menos, de quienes llamen tu atención. Ese ejercicio te ayudará a notar qué tan correctos, capaces, eficientes e idóneos puedan ser al momento de asumir uno de los cargos, lo que influirá para que tomes una decisión mucho más informada y con la que sientas seguridad y tranquilidad.
Quizá te sirva de algo saber que alguien que cumple sus promesas primero debe mostrar sus obras pasadas: lo que ha hecho y cuál ha sido su actividad en beneficio del país. Te animo a meditar y a razonar tu voto, reconociendo que Dios es quien coloca y quita reyes, tal como lo dice Su Palabra. No dejemos de orar e interceder por nuestra nación, convencidos de que Él hará Su obra poderosa, según Su perfecta voluntad.
Deseo que el Señor te llene de prudencia y sabiduría para elegir a los mejores candidatos. ¡Guatemala es de Dios!